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viernes, 31 de enero de 2014

Estudios brasileños revelan particularidad genética de los UROS de Perú y Bolivia

 
Los Uros o Urus, una etnia que habita la región de Los Andes entre Perú y Bolivia, carecen de vínculos genéticos con los Aymarás y los Quechuas, pueblos predominantes en la cordillera andina con los que comparten territorios hace siglos y con los que siempre se les consideró aparentados.
La identificación de los uros como una etnia sin ancestrales comunes con sus vecinos es resultado de un estudio genético realizado por un equipo de investigadores internacionales liderado por científicos brasileños.
El examen genético mostró que los ancestrales paternos y maternos de los uros son muy diferentes de los de los Aymaras y de los Quechuas, según un comunicado divulgado hoy por la brasileña Universidad Federal de Minas Gerais (UFMG), cuyos investigadores coordinaron el estudio.
Los resultados del estudio coordinado por el brasileño Fabricio Rodrigues Santos, investigador del Instituto de Ciencias Biológicas de la UFMG, fueron destacados en el artículo "The Genetic History of Indigenous Populations of the Peruvian and Bolivian Altiplano: The Legacy of the Uros".
"Esa peculiaridad obedece a que los actuales uros de Perú y de Bolivia son descendientes de puebles diferentes de los que originaron la mayoría de las otras comunidades de la región", aseguró Santos.
"Es muy interesante constatar que pueblos parecidos y que habitan el mismo local hace tanto tiempo tienen orígenes tan diferentes", agregó el especialista.
El estudio fue realizado a partir de muestras de ADN recogidas en la saliva de 388 miembros de la etnia, entre los que habitan las islas del lago Titicaca en Peru como de los Uru-Chipaya y los Uru-Poopó, que habitan en Bolivia.
Lake Titicaca - Uros Community
Las muestras genéticas, recogidas con autorización de los gobiernos de la región, fueron analizadas en los laboratorios de la universidad brasileña.
"Analizamos los marcadores de la linaje paterna del cromosoma Y y de la linaje materna del ADN del mitocondrias para comparar los Uros con las otras comunidades de la región", de acuerdo con el científico.
Según el investigador, la genética puede ayudar a rescatar parte de la historia de un pueblo y a reconstruir su pasado desconocido, que se perdió en parte porque parte de la etnia abandonó el uruquilla, su lengua original.
"Los urus de Perú no hablan más su lengua porque asimilaron el aymará y el español, las lenguas habladas por los grupos dominantes en la región. Inicialmente ellos fueron dominados y reprimidos por los Aymará y los Quechua, después por los Incas y por los colonizadores españoles", aseguró.
El estudio igualmente confirmó que los Uros que habitan Perú, pese a las versiones de que tan sólo se identifican como de esta etnia para aprovechar el turismo, son de un grupo genético diferente al de sus vecinos.
"El estudio muestra que realmente tienen ancestrales particulares y que, pese a haber perdido la lengua, tienen una identidad étnica", agregó.
El estudio genético con los uros forma parte de un proyecto financiado por National Geographic y por IBM que se propone reconstruir la historia de diferentes poblaciones en todo el mundo.

martes, 21 de enero de 2014

Tarcila de Amaral, preclara representante del modernismo brasileño

 
Tarsila do Amaral fue una pintora e dibujante brasileña. Su cuadro "Abaporu" pintado en 1928 es su obra más conocida. Junto con los escritores Oswald de Andrade y Raul Bopp, creó el movimiento "Antropofagia", el más radical de todos los movimientos del período Modernista, inspirado en el cuadro "Abaporu" que significa antropófogo en el idioma nativo, tupi.
Tarsila do Amaral (1886-1973) nació em la hacienda São Bernardo, perteneciente al municipio de Capivari, interior del Estado de São Paulo. Hija de José Estanislau do Amaral Filho y de  Lydia Dias de Aguiar do Amaral. Era nieta de José Estanislau do Amaral, que em razón de haber acumulado fortuna adquiriendo haciendas en el interior de São Paulo, era llamado  de "millonário". Su padre heredó apreciable fortuna y diversas haciendas donde tarcila paso su infância y adolescência.
          Abaporu - Tarsila do Amaral
La artista plástica paulista es la pintora más representativa de la primera fase del movimiento modernista brasileño. Su cuadro Abaporu, de 1928, inaugura el Movimiento Antropofágico en los artistas plásticos del país. Comenzó a aprender pintura en 1917, con Pedro Alexandrino. Más tarde, estudió con George Fischer Elphons. En 1920, viajó a París y frecuentó la Académie Julien, donde recibió la orientación de Émile Renard. En Francia, conoce a Fernand Léger y participa del Salón Oficial de los Artistas Franceses de 1922, desarrollando técnicas influenciadas por el cubismo. De vuelta a Brasil el mismo año, se une la Anita Malfatti, Menotti del Picchia, Mário de Andrade y Oswald de Andrade, formando el llamado Grupo de los Cinco, que defiende las ideas de la Semana de Arte Moderno y se coloca al frente del movimiento modernista en el país.
Se casa con Oswald de Andrade en 1926 y, el mismo año, realiza su primera exposición individual, en la Galería Percier, en París. A partir de entonces, sus obras adquieren fuertes características primitivistas y nativistas. Es característico de esta época su cuadro Abaporu, que sirvió de rostro al movimiento antropofágico.
En 1933, pasa a desarrollar una pintura más conectada a temas sociales, de la cual son ejemplos las telas Obreros y Segunda Clase. Expone en las dos primeras Bienales de São Paulo y gana una retrospectiva en el Museo de Arte Moderno de São Paulo (MAM) en 1960. Se le dedica una sala especial en la Bienal de São Paulo de 1963 y, el año siguiente, se presenta en la 32ª Bienal de Venecia.
 
 
Tarsila do Amaral fue llevada al cine y la televisión, interpretada por Ester Góes en la película "Eternamente Pagu" (1987), y por Eliane Giardini en las miniseries "Um Só Coração" (2004) y "JK" (2006).

El general José Artigas, paladín de la lucha por la libertad del Uruguay

 
Para los uruguayos el verdadero sentido de su nacionalidad nace con la fuerza del movimiento revolucionario liderado por José Artigas, un antiguo soldado de la corona española que después, lideró el movimiento popular que lucho por la independencia de Uruguay.
Artigas luchó por la emancipación de su tierra, de su pueblos, de los oprimidos y por el ideal de la libertad e igualdad. No se sometió a España, representada por el virreinato con sede en Buenos Aires ni tampoco a las tropas luso-portuguesas, en la guerra cisplatina. Realmente un héroe a carta cabal.
José Gervasio Artigas nació en Montevideo el 19 de junio de 1764. Fueron sus padres Don Martín José Artigas y Doña Francisca Antonia Arnal. Su abuelo paterno, Juan Antonio, figuró entre los primeros pobladores de Montevideo. Después de estudiar en el colegio franciscano de San Bernardino, se dedicó a las tareas rurales en las estancias de su padre. Años más tarde comenzó a ganarse la vida comprando cueros en la campaña para venderlos a los exportadores de Montevideo. En 1791 nació su primer hijo, Manuel, fruto de su unión con Isabel Sánchez.
En 1797 ingresó como soldado de caballería en el regimiento de Blandengues, creado para combatir el robo de ganado, el contrabando en la Banda Oriental, y proteger la frontera con el Brasil. En 1805, siendo ya oficial del Cuerpo, debió retirarse del ejército por razones de salud y se casó con su prima Rafaela Villagrán. Con ella tendrá tres hijos: José María, Francisca y Petronila. Pero lamentablemente, las dos niñas morirán a los pocos meses de su nacimiento, lo que deprimió tanto a Rafaela que terminó por enloquecer. Artigas debió retornar al servicio activo y en 1806, durante las invasiones inglesas participó en la reconquista de Buenos Aires y en la defensa de Montevideo a las órdenes de Liniers.
La rebelión de Artigas
En febrero de 1811, el Gobernador español de Montevideo, Javier de Elío, nombrado ahora Virrey del Río de la Plata, le declaró la guerra a la Junta revolucionaria creada en Buenos Aires en mayo de 1810. El entonces capitán Artigas desertó de la guarnición de Colonia y se puso a disposición del gobierno porteño, que le dio el grado de teniente coronel, 150 hombres y 200 pesos para iniciar el levantamiento de la Banda Oriental contra el poder español. El 28 de febrero de 1811, dos campesinos, Pedro José Viera y Venancio Benavídez, con el apoyo del sublevado comandante militar de la región, Ramón Fernández, daban en Asencio (Soriano) el grito de libertad del pueblo oriental y se disponían a luchar junto a Artigas.
Del triunfo a la decepción
Artigas fue reclutando un verdadero ejército popular formado por los gauchos orientales, empobrecidos por la administración de Elío. Repartió entre sus paisanos las tierras y los ganados que les iba tomando a los españoles. Con estas fuerzas, el 18 de mayo de 1811 derrotó a los realistas en el combate de Las Piedras y, puso sitio a Montevideo hasta que, sorpresivamente y sin consultarlo, el Primer Triunvirato firmó el 20 de octubre un armisticio con Elío por el cual se comprometía a retirar las tropas patriotas.
El éxodo del pueblo oriental
Disgustado con este desenlace, seguido por sus milicianos y la mayoría de la población oriental, Artigas se retiró hacia Entre Ríos para reorganizar la lucha. De todos lados llegaban familias huyendo de la persecución española a colocarse bajo su protección y a ofrecerse para luchar contra los españoles y los portugueses, que habían comenzado a penetrar desde el norte de la Banda Oriental por pedido de Elío. Mil carretas y unas 16 mil personas (hombres, mujeres y niños) con sus pocos ganados y pertenencias, cruzaron el río Uruguay y se instalaron en Ayui, cerca de la actual Concordia (Entre Ríos) preparados para continuar la lucha. Era el famoso éxodo del pueblo oriental. Pero el Primer Triunvirato envió a Manuel de Sarratea para reemplazar a Artigas en el mando de las tropas orientales. Sólo cuando a fines de 1812, tras la caída del Primer Triunvirato, Sarratea fue reemplazado por Rondeau, y se le devolvió su mando a Artigas, los orientales aceptaron unirse a las tropas porteñas para sitiar Montevideo.
Instrucciones revolucionarias
Al inaugurarse la Asamblea del Año XIII, la Banda Oriental eligió sus representantes en un Congreso y, por inspiración de Artigas, les dio precisas instrucciones de contenido federalista y revolucionario: inmediata declaración de Independencia, constitución republicana, libertad civil y religiosa, igualdad de todos los ciudadanos, gobierno central con respeto a las autonomías provinciales y el establecimiento de la capital fuera de Buenos Aires.
Argumentando pretextos formales, la Asamblea rechazó los diplomas de los diputados orientales. Rondeau convocó otro Congreso para elegir nuevos diputados y Artigas rompió entonces abiertamente con Buenos Aires. El Director Supremo Gervasio Posadas lo declaró "traidor" y puso precio de 6.000 pesos a su cabeza.
¿Por qué rechazaron a los diputados de Artigas?
La Asamblea del Año XIII, presidida por Carlos María de Alvear, temía que la incorporación de los artiguistas produjera una virtual alianza entre el caudillo oriental y San Martín para apurar una declaración de independencia, que el grupo alvearista, en consonancia con los intereses de Gran Bretaña, ahora aliada de España, pretendía retrasar lo más posible.
La clase alta porteña temía que la influencia del caudillo oriental y su enorme popularidad se extendieran al resto de las provincias. Veía en la acción de Artigas un peligroso ejemplo que propugnaba un serio cambio social. El reparto de tierras y ganado entre los sectores desposeídos concretado por Artigas en la Banda Oriental, bien podía trasladarse a la otra margen del Plata y poner en juego la base de su poder económico.
El precursor del federalismo en el Río de la Plata
José Artigas fue el primero en plantear claramente en el Río de la Plata las ideas del federalismo. Así se lo contó él mismo al general Paz: "Tomando por modelo a los Estados Unidos yo quería la autonomía de las provincias, dándole a cada estado un gobierno propio, su constitución, su bandera y el derecho de elegir a sus representantes, a sus jueces y a sus gobernadores entre los ciudadanos naturales de cada estado. Esto es lo que yo había pretendido para mi provincia y para las que me habían proclamado su protector. Hacerlo así habría sido darle a cada uno lo suyo".
La Liga de los Pueblos Libres
Para 1814, la popularidad de Artigas se había extendido a varias de las actuales provincias argentinas, afectadas, al igual que la Banda Oriental, por la política de libre comercio y puerto único, promovida por Buenos Aires, que arruinaba a los artesanos y campesinos del Interior. Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Misiones y Córdoba se unieron a los orientales, formando la Liga de los Pueblos Libres. Como Protector de la Liga, Artigas luchó junto con los jefes litoraleños contra el centralismo del Directorio. La liga formó una especie de mercado común regional en el que se protegía a los productores locales y se fomentaba la agricultura a través del reparto de tierras, animales y semillas. No pagaban impuestos las máquinas, los libros y las medicinas y derivaba el comercio del Litoral al puerto de Montevideo.
El Congreso de los Pueblos Libres
En 1815 Artigas recuperó Montevideo, ocupada hasta entonces por las tropas porteñas, y convocó en Concepción del Uruguay el 29 de Junio de 1815 al Congreso de los Pueblos Libres. Allí estaban los diputados por la Banda Oriental, Corrientes, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Misiones. Sus primeros actos fueron jurar la independencia de España, izar la bandera tricolor (igual a la de Belgrano pero atravesada por una franja roja, símbolo del federalismo) y la resolución de no concurrir al Congreso de Tucumán convocado por el Directorio, en protesta por la actitud del gobierno porteño de fomentar la invasión portuguesa a la Banda Oriental para terminar con Artigas.
Mientras se reunía el Congreso de Tucumán, Artigas y su gente defendía el territorio contra una nueva invasión de los portugueses, que tomaron Montevideo en 1817.
El principio del fin
A fines de 1819 la Liga estaba entre dos fuegos, por un lado los directoriales y por el otro los portugueses. Artigas concibió un plan militar. Él atacaría el campamento portugués en Río Grande mientras que las fuerzas de Entre Ríos y Santa Fe atacarían Buenos Aires. Pero mientras el caudillo de Santa Fe, Estanislao López, y su compañero de Entre Ríos, Francisco Ramírez, invadían exitosamente Buenos Aires y triunfaban en Cepeda, Artigas era derrotado por los portugueses en Tacuarembó.
Aprovechando esta situación de debilidad de su antiguo jefe, los caudillos firmaron a espaldas de Artigas el Tratado del Pilar, abandonando a su suerte al caudillo oriental. Ante la traición, Artigas decidió unir sus escasas fuerzas con las de Corrientes y Misiones. Entró en Entre Ríos dispuesto a someter a Ramírez, pero fue derrotado definitivamente en Las Huachas y debió marchar hacia el exilio en el Paraguay.
El padre de los pobres
En el Paraguay vivió humildemente, bajo la protección de los sucesivos gobernantes paraguayos, Gaspar Rodríguez de Francia y Carlos Antonio López. Vivía en una modesta chacra rodeado de indios y campesinos que lo llamaban en guaraní Caraí Marangatú (Padre de los pobres). Después de tres décadas de exilio paraguayo, Artigas murió, a los 86 años, el 23 de setiembre de 1850. Sus restos fueron repatriados al Uruguay en 1855.
Artigas según Artigas
"Yo no hice otra cosa que responder con la guerra a los manejos tenebrosos que el Directorio me hacía por considerarme enemigo del centralismo, el cual sólo distaba un paso del realismo (la monarquía). Pero los Pueyrredones y sus acólitos querían hacer de Buenos Aires una nueva Roma imperial, mandando sus procónsules a gobernar a las provincias militarmente y despojarlas de toda representación política, como lo hicieron rechazando los diputados al Congreso que los pueblos de la Banda Oriental habían nombrado y poniendo precio a mi cabeza."
El éxodo
"Cada día veo con más admiración sus rasgos singulares de heroicidad y constancia. Unos quemando sus casas y los muebles que no pueden conducir; otros caminando leguas y leguas a pie por falta de auxilios o por haber consumido sus cabalgaduras en el servicio. Mujeres ancianas, viejos decrépitos, párvulos inocentes, acompañan esta marcha manifestando todos la mayor energía y resignación en medio de todas las privaciones. Yo llegaré muy en breve a mi destino con este pueblo de héroes, y al frente de seis mil de ellos que obran como soldados de la patria trabajaré gustoso en propender a la realización de sus grandes votos".
 

Graciliano Ramos, talento brasileño de la literatura regionalista

 
Graciliano Ramos, uno de los mejores talentos de la literatura regionalista brasileña, nace el 27 de octubre del 1892, en Quebrangulo perteneciente al Estado Brasileño de Alagoas, fuel el primogénito de 16 hermanos. Fue un escritor comprometido además con la problemática social de su región.
Durante su infancia vivió en diferentes ciudades de Alagoas y Pernambuco; posteriormente, al término de sus estudios en Maceio se traslada a Río de Janeiro, donde trabajó como periodista. 1915, Regresó al Nordeste junto a su padre, que era comerciante, en Palmeira dos Índios. Ese mismo año se casó con Maria Augusta de Barros, quien falleció en 1920, dejándole cuatro hijos.
Graciliano vio por conveniente establecerse en esa ciudad donde llega a asunir el cargo de Alcalde, hasta el año hasta 1930 que renuncia. Los informes de prefectura que escribió en ese periodo llamaron la atención del poeta y  editor carioca Augusto Federico Scmidt, quien lo anima a publicar Caetés, en 1933.
Entre 1930 y 1936 vivió nuevamente en Maceió donde trabajó como director de la Imprenta Oficial, profesor y director estatal de Instrucción Pública. En 1934 ya había publicado São Bernardo, y cuando se preparaba para publicar su próximo libro, cayó preso en el marco de la represión desatada por el gobierno de Getulio Vargas, luego de la conocida “intentona comunista”. Años más tarde, en un nuevo libro denominado Memórias do Cárcere, donde relata su experiencia en estos avatares políticos.
En 1936 publica su libro “Angustia”, considerada por muchos críticos como su mejor obra. En 1938 publicó Vidas Secas, y se establece en Río de Janeiro, como inspector federal de enseñanza. En 1945 ingresó al antiguo Partido Comunista do Brasil, de orientación soviética que era liderado por Luis Carlos Prestes. En los años siguientes realizó varios viajes por Europa, en compañía de Heloísa Medeiros Ramos, su segunda esposa. Estos viajes fueron retratados en Viagem, de 1954. En 1945 publicó Infância, un relato de corte autobiográfico.
En su obra “Vidas Secas”, Graciliano Ramos, describe en forma magistral la trsite condición de miseria que la que viven miles de personas que se ven obligados a mudarse contantemente por causa de las sofocantes sequias del noreste brasileño.
Graciliano, realizó además algunas traducciones desde el inglés y el francés. Entre ellas Memorias de un Negro de Booker T, Washintong y  “La peste” de Albert Camus.
Muchas de sus obras fueron llevadas al cine, incluyendo  su libro “Vidas Secas” (1963) y “Memorias do Cárcere” (1984), dirigidos por Nelson Pereira dos Santos. Tambien se filmó “San Bernardo” en1972, que fue dirigida por el cineasta Leon Hirszman.
Graciliano Ramos fallece un 20 de marzo del año 1953, a los 60 años, víctima de un cáncer de pulmón.